Los Templos Aztecas y el Colonialismo

Desde que existe la consciencia humana, el hombre ha establecido sistemas de poder, ya sean políticos o religiosos. Se habló en los blogs pasados de los sistemas proporcionales, pero no se ha dialogado desde una perspectiva colonial, tomando ejemplo a muchas de los templos Aztecas de el área de México. En cambio, algunas de las mismas ya no existen gracias a los grandes cambios que se impusieron durante el colonialismo histórico mundial. Muchas estructuras tristemente no se preservaron de una manera correcta, lo cual le brinda un trabajo importante a los arqueólogos para reconstruir la historia arquitectónica de las maravillas del pasado.


Los templos aztecas se caracterizaron por ser pirámides escalonadas, las cuales representan el mejor ejemplo de basamentos dentro de la arquitectura antigua. Los mismos no solo tenían una función espiritual, sino que también simbolizaban la conexión entre el plano terrenal y el plano celestial. También se incorporan los elementos decorativos, brindando estética al aspecto celestial con figuras y estatuas. Muchas ciudades aztecas que incorporan templos también seguían una organización simétrica en la cual se colocaba un eje que establecía la composición general del diseño. Adicionalmente, en la planta muchos representaban su espacio ritualístico religioso con proporción áurea, la cual demuestra que civilizaciones antiguas entendían la importancia de la perfección geométrica dentro de sus prácticas y proyectos arquitectónicos.


Por otro lado, los colonizadores españoles llegaron a Ciudad de México y destruyeron el templo mayor, una de las estructuras más importantes e impresionantes dentro de la cultura azteca. Los mismos la derribaron en su conquista y construyeron encima de las ruinas la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México. La misma es una catedral impresionante y hermosa, pero definitivamente simboliza el control político y religioso que recibe una cultura colonizada del colonizador, destruyendo sus monumentos históricos impresionantes y sustituyéndolos por otros conceptos.


La guerra y la destrucción siempre han sido a causa del poder, religioso o político. Las culturas primitivas eran igual de capaces de las avanzadas de diseñar en base a la divina proporción, justificado por los hermosos y bien organizados templos aztecas. Sin embargo, optemos por no sustituir, pero mejorar en conjunto. Gracias a los historiadores conocemos las estructuras del pasado, pero es nuestro deber moderno preservar las que quedan.



Referencias

Isado, J. (s.f.). plinths, platforms, plateaus. https://www.isado.net/4211-enlaces


Isado, J. (s.f.). de bramante a palladio (florencia, roma y el veneto). https://www.isado.net/4211-enlaces


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